Santa Eulalia y Llum Bcn

¿Conoces la historia de Santa Eulàlia y porque es patrona de Barcelona? Santa Eulàlia ha estado en este último siglo eclipsada por La Mercè pero cada vez vuelve a tener más fuerza y su historia es conocida por más barceloneses y visitantes.

En la actualidad se celebran unas bonitas fiestas en su honor y como no puede ser de otra manera traen un año más a Barcelona todo tipo de actividades a la ciudad. Este año del 11 al 14 de febrero la ciudad se llena de celebraciones tradicionales que, junto con el estupendo festival LlumBCN, nos recuerdan que en Barcelona también tenemos una fiesta mayor de invierno.

Entre los numerosos actos que podemos encontrar esta por supuesto el ya mencionado LLumBCN, pero además podemos disfrutar del baile del Águila de este jueves a las 20:00 o sino esperarnos al viernes y ver sus diferentes pasacalles, bailar sardanas o disfrutar de una diada castellera, un correfoc, una feria de artesania y sin olvidar algún mágico concierto.

¿Pero que dice la leyenda de ella? Tenemos que remontarnos a los últimos años del siglo III e imaginarnos la historia de una niña de 13 años que emprendió el camino hacia Barcelona a pie para increpar al juez Daciano.

 El resultado fue que el juez Daciano la torturó con 13 prácticas diferentes, entre ellas, la extendieron en un potro donde unos hombres con garfios le arrancaron la piel, le cortaron los pechos y la rociaron en aceite para quemarla. Otra tortura fue ponerla en un tonel lleno de cristales rotos y cuchillos y tirarla por lo que hoy en día se conoce como Bajada de Santa Eulalia.

Posteriormente, el juez romano mandó colgarla en una cruz en forma de aspa, que a partir de ese momento, pasaría a llamarse cruz de Santa Eulalia, símbolo de la Catedral de Barcelona. En el momento de su muerte en la cruz, una paloma blanca salió de la boca de Santa Eulalia, llevando su alma al cielo.

El pueblo que asistió a aquel espectáculo, al ver tantas maravillas, quedó fuertemente impresionado y admirado y con el tiempo los actos de esta niña la sirvieron para convertirse en patrona de Barcelona.